Saitec incorpora IA en el aerogenerador flotante Demosath Lab en Armintza para monitorizar su interacción con el entorno y reducir el impacto ambiental
En su aerogenerador marino flotante Demosath Lab, la ingeniería vasca analiza en tiempo real las interacciones entre turbinas eólicas y la fauna local, empleando sistemas de inteligencia artificial que identifican patrones de aves marinas y monitorizan especies submarinas mediante imágenes subacuáticas. El proyecto tiene el objetivo de minimizar el impacto ambiental mediante protocolos de parada preventiva, dispositivos disuasorios y modelos predictivos basados en datos históricos y variables meteorológicas, contribuyendo así a diseños futuros de parques eólicos marinos compatibles con el ecosistema del litoral vasco.
El aerogenerador marino flotante Demosath Lab, instalado a cuatro kilómetros de la costa de Armintza, funciona como un laboratorio para estudiar las interacciones entre turbinas eólicas y la fauna local. Este dispositivo desarrolla un programa de investigación gestionado por la ingeniería Saitec con el objetivo de minimizar impactos ambientales en aves marinas y especies del litoral de Lemoiz.
Saitec ha implementado sistemas de detección, seguimiento y mitigación validados durante los primeros años de operación. Entre las medidas destacan dispositivos disuasorios para la fauna, protocolos de parada preventiva de la turbina ante situaciones de riesgo y campañas de monitorización submarina que permiten identificar con precisión la presencia de peces y otros organismos. Estas acciones responden a uno de los desafíos principales en la operación de aerogeneradores offshore: garantizar la compatibilidad con el entorno biológico.
Una cámara situada en la plataforma emplea inteligencia artificial para analizar en tiempo real el comportamiento de aves, como la gaviota patiamarilla (Larus michahellis), calculando alturas de vuelo y detectando agrupaciones potencialmente expuestas a riesgos. El sistema opera continuamente, incluso con mala mar, procesando tanto vídeo en directo como datos históricos para ajustar la actividad del aerogenerador y reducir interferencias.
La aplicación de la IA se extiende al medio submarino mediante el análisis de imágenes bajo el agua, lo que posibilita cuantificar abundancias de peces, ciclos biológicos y patrones de presencia alrededor de la estructura. Esta metodología, replicable en puertos y otras infraestructuras marinas, busca evaluar el rol ecológico de dichas instalaciones en el ecosistema local.
En paralelo, se preparan herramientas para procesar ultrasonidos de murciélagos, registros acústicos submarinos y fotografías de cámaras de fototrampeo, ampliando el monitoreo a múltiples especies. Los datos recopilados, como mapas de actividad, variaciones estacionales y correlaciones con condiciones meteorológicas, servirán para optimizar el diseño de futuros parques eólicos marinos.
Saitec subraya que estos avances buscan consolidar la eólica offshore como una fuente de energía limpia y eficiente, capaz de integrarse armónicamente en el medio natural. El proyecto refuerza el compromiso de la empresa con soluciones técnicas que equilibran la transición energética y la preservación de la biodiversidad.
Fuente original: El Correo